Junio 6 del 2007. México DF.
Desde mi pelona y para el mundo que por estas fechas sigue estando pelón y como diría Don Teofilito, seguirá.
Por mera curiosidad y a raíz de la famosa reunión del llamado Grupo de los Ocho en Alemania durante esta semana me puse a la tarea de averiguar ciertos numerillos de este famoso equipo de amigos que sin lugar a duda sería el dream team de los dineros haciendo palidecer a los mismísimos Galácticos del Real Madrid tanto en profundidad de juego como en individualidades.
Cada vez más estoy convencido de que es una ley natural aquello de que el pez grande se come al chico. Para que suceda lo contrario solo podría ser actualmente con la ayuda de un milagro, lo cual veo difícil que ocurra ya que lógicamente este grupo de amigos del G8 se ayudará y se protegerá a ultranza para seguir siendo un fabuloso emporio en cualquier ámbito que se nos ocurra: desde los deportes hasta la innovación tecnológica. Hablando futboleramente es como si el añorado equipo de la Selva Morelense, el famoso Zacatepec con todo y el maravilloso “Harapos” Morales –y me pongo de pié- le metiera al Manchester ocho o nueve goles en Inglaterra, en invierno y después de que todo el equipo del estado de Morelos se haya ido de juerga la noche anterior, o que un equipo de pigmeos y desnutridos le ganen a los Harlem Glob Trotters. Todos sabemos que puede ser posible, pero no creo que ninguno de nosotros y en nuestro sano juicio en una quiniela pongamos como superior al equipo cañero. Hay niveles, o como dicen por ahí hasta en los perros hay razas, sin menospreciar ni al Zacatepec ni a los Chihuahueños, ni a los pigmeos.
Para darnos idea de cómo está repartido el dinero en este grupo de malandrines y mañandrines digamos que de cada peso, dólar, euro o de cualquier unidad monetaria que Usted quiera la situación quedaría así: Estados Unidos 28 centavos, Japón con 10, la gloriosa Alemania con 6, Gran Bretaña con 5, Francia con un poquitín menos de 5, Italia con 4, Canadá con 2.5 y la Federación Rusa con el ridículo de 1.6 centavos.
La suma de todo esto arroja un total de alrededor de 63 centavos repartidos en solo ocho países. Los otros 37, para llegar a 100 la sumamos todos los demás países, incluido por supuesto el pueblo de mi madre, Tarandacuao, que su contribución ha de ser de tamaño menos que microscópico pero orgullosamente Guanajuatense y Mexicano con camote, habas cocidas, y las riquísimas tostadas de mi tía María en la esquina del jardín.
Cuando se ven estas diferencias, lo menos que podemos pensar es que cualquier trabajo o manufactura en nuestros países si la comparamos con los del G8 sin duda es, me atrevería a decir artesanal y eso que decididamente la ex Unión Soviética está dentro de este grupo por su poderío nuclear el cual puede alborotar a la gallera en cualquier momento. Es muy cierto el dicho de que “el miedo no anda en burro” y el G8 lo aplica a la perfección. La población, igualmente de este selecto grupo apenas ronda el 13% de la mundial y es la que tiene acceso a todo tipo de adelantos y “beneficios” tecnológicos. La brecha entre estos países y en nuestro caso, México es abismal y la brecha que nos divide cada vez es más grande y profunda. Con perdón de Ustedes, creo que son sueños guajiros el que nuestros políticos nos digan que los alcanzaremos, que en treinta o en veinte años estaremos a la par de ellos, o bien que son capaces de abatir la pobreza hasta niveles extraordinarios en unos cuantos años como lo pregona el rojillo Hugo Chávez a quien tal vez se le esté engordando el caldo con el cierre de una cadena televisiva en su país. Sabemos que es imposible en unos cuantos años. Esto es mundo real dónde hay ricos, pobres, gordos, flacos y hasta calvos como un amigo que su problema no es de falta de pelo, sino de distribución como el dice. Mundo real, soluciones reales no quiméricas y estar ubicado en nuestra realidad como país, como sociedad, como personas.
¿Qué hacer ante este panorama? Creo que lo principal es como aquel chiste de “ubicarse”en nuestra justa medida y realidad tratando en la medida de lo posible de avanzar poco a poco en materia social para apoyar a los mas necesitados. ¿Cómo? Aunque suene a chiste, con el apoyo del G8 que son los que tienen el poder económico. En verdad es ridículo todo esto.
Si esto fuera un juego futbolero creo que el entrenador indicado para ir a jugar a Wembley contra la Selección Inglesa sería el mítico “bombero mayor”, Arpad Fékete para de que menos salir a la cancha confiados en once jugadores que no pasarán de la media cancha, harán una defensa total…y rezar porque todo, pero todo salga bien.
MFV
Desde mi pelona y para el mundo que por estas fechas sigue estando pelón y como diría Don Teofilito, seguirá.
Por mera curiosidad y a raíz de la famosa reunión del llamado Grupo de los Ocho en Alemania durante esta semana me puse a la tarea de averiguar ciertos numerillos de este famoso equipo de amigos que sin lugar a duda sería el dream team de los dineros haciendo palidecer a los mismísimos Galácticos del Real Madrid tanto en profundidad de juego como en individualidades.
Cada vez más estoy convencido de que es una ley natural aquello de que el pez grande se come al chico. Para que suceda lo contrario solo podría ser actualmente con la ayuda de un milagro, lo cual veo difícil que ocurra ya que lógicamente este grupo de amigos del G8 se ayudará y se protegerá a ultranza para seguir siendo un fabuloso emporio en cualquier ámbito que se nos ocurra: desde los deportes hasta la innovación tecnológica. Hablando futboleramente es como si el añorado equipo de la Selva Morelense, el famoso Zacatepec con todo y el maravilloso “Harapos” Morales –y me pongo de pié- le metiera al Manchester ocho o nueve goles en Inglaterra, en invierno y después de que todo el equipo del estado de Morelos se haya ido de juerga la noche anterior, o que un equipo de pigmeos y desnutridos le ganen a los Harlem Glob Trotters. Todos sabemos que puede ser posible, pero no creo que ninguno de nosotros y en nuestro sano juicio en una quiniela pongamos como superior al equipo cañero. Hay niveles, o como dicen por ahí hasta en los perros hay razas, sin menospreciar ni al Zacatepec ni a los Chihuahueños, ni a los pigmeos.
Para darnos idea de cómo está repartido el dinero en este grupo de malandrines y mañandrines digamos que de cada peso, dólar, euro o de cualquier unidad monetaria que Usted quiera la situación quedaría así: Estados Unidos 28 centavos, Japón con 10, la gloriosa Alemania con 6, Gran Bretaña con 5, Francia con un poquitín menos de 5, Italia con 4, Canadá con 2.5 y la Federación Rusa con el ridículo de 1.6 centavos.
La suma de todo esto arroja un total de alrededor de 63 centavos repartidos en solo ocho países. Los otros 37, para llegar a 100 la sumamos todos los demás países, incluido por supuesto el pueblo de mi madre, Tarandacuao, que su contribución ha de ser de tamaño menos que microscópico pero orgullosamente Guanajuatense y Mexicano con camote, habas cocidas, y las riquísimas tostadas de mi tía María en la esquina del jardín.
Cuando se ven estas diferencias, lo menos que podemos pensar es que cualquier trabajo o manufactura en nuestros países si la comparamos con los del G8 sin duda es, me atrevería a decir artesanal y eso que decididamente la ex Unión Soviética está dentro de este grupo por su poderío nuclear el cual puede alborotar a la gallera en cualquier momento. Es muy cierto el dicho de que “el miedo no anda en burro” y el G8 lo aplica a la perfección. La población, igualmente de este selecto grupo apenas ronda el 13% de la mundial y es la que tiene acceso a todo tipo de adelantos y “beneficios” tecnológicos. La brecha entre estos países y en nuestro caso, México es abismal y la brecha que nos divide cada vez es más grande y profunda. Con perdón de Ustedes, creo que son sueños guajiros el que nuestros políticos nos digan que los alcanzaremos, que en treinta o en veinte años estaremos a la par de ellos, o bien que son capaces de abatir la pobreza hasta niveles extraordinarios en unos cuantos años como lo pregona el rojillo Hugo Chávez a quien tal vez se le esté engordando el caldo con el cierre de una cadena televisiva en su país. Sabemos que es imposible en unos cuantos años. Esto es mundo real dónde hay ricos, pobres, gordos, flacos y hasta calvos como un amigo que su problema no es de falta de pelo, sino de distribución como el dice. Mundo real, soluciones reales no quiméricas y estar ubicado en nuestra realidad como país, como sociedad, como personas.
¿Qué hacer ante este panorama? Creo que lo principal es como aquel chiste de “ubicarse”en nuestra justa medida y realidad tratando en la medida de lo posible de avanzar poco a poco en materia social para apoyar a los mas necesitados. ¿Cómo? Aunque suene a chiste, con el apoyo del G8 que son los que tienen el poder económico. En verdad es ridículo todo esto.
Si esto fuera un juego futbolero creo que el entrenador indicado para ir a jugar a Wembley contra la Selección Inglesa sería el mítico “bombero mayor”, Arpad Fékete para de que menos salir a la cancha confiados en once jugadores que no pasarán de la media cancha, harán una defensa total…y rezar porque todo, pero todo salga bien.
MFV
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